La preocupación por lo urbano y la arquitectura una constante en mi obra, cuyo origen suele ser la observación de la red de signos que conforma la experiencia visual de la ciudad. A partir de la observación de los detalles, lo concreto, construyo discursos que abarcan dibujos amplios de la convivencia en las ciudades. Las formas en que se materializa mi obra se pueden agrupar en dos líneas de investigación diferenciadas que no obstante tienden cada vez más a entrecruzarse.

Por un lado, aislar y comparar elementos de este conglomerado de signos del que hablaba me permite abordar, a través de proyectos fotográficos y audiovisuales, cuestiones que subyacen a la apariencia de normalidad del espacio público. Por otro lado, alterar ciertos elementos en intervenciones e instalaciones en el espacio público me permite generar intersticios en los que la cotidianidad y las lógicas operativas de la sociedad se ven afectadas.

La metáfora de la piel me sirve en mis últimos trabajos como punto de partida para leer la ciudad. Esta idea define por un lado una superficie que abarca todo lo que las personas pueden ver o tocar en la calle, pero por otro, permite pensar en la ciudad como un ente sensible a la interacción con los seres humanos que la habitan. Esta figura me permite también zafarme de la dialéctica entre lo público y lo privado y pensar ese espacio compartido desde una colectividad diferente, desde una ética de responsabilidad y cuidados.

Esa superficie está conformada por una red compleja de signos que se superponen en el tiempo, como en un palimpsesto. Como diría Santiago Alba Rico, la ciudad es un cruce o amontonamiento o intercambio poético de rastros. Algunos de estos elementos son fáciles de descifrar pero otros pasan desapercibidos, ya sea porque es difícil aislar de esa acumulación de información lo relevante ya sea porque se necesitan códigos muy específicos para poder comprender su significado.

De esta acumulación, centro mi atención en las heridas y cicatrices que la pueblan, las cuales nos permiten abordar tensiones con implicaciones socio-políticas de diversa índole y magnitud que den lugar a una reflexión sobre el conflicto como elemento conformador de la experiencia visual (y vital) de la ciudad.


cast / cat